Y este silencio que ahora me llena ...
no tiene remedio...me sostiene fuerte y ata mis labios,
como en antaño
cuando podía ver sus ojos todos los días...
y nunca le dije que le amaba...y jamás intente tomar de sus labios...
y reprimí el deseo que me provocaba su perfume...
y le amé...le amé...
en absoluto y cruel silencio.
Y construí una lápida con su dulce nombre ...
y la colgué en mi pecho y aun yace ahí ...cerca de mi corazón.
Y todas las noches le espero,
le espero sin consuelo...llena de culpa y desconcierto,
por no haber gritado con apasionada ira
que me tomara en sus brazos...
que me amara noche a noche..
que bebiera del vino sagrado que guardo en mis labios,
que soy suya y solo suya...
y que este doliente silencio fue quien le aparto de mi.
Y ahí esta...puedo verle...lejos...ausente...
Siento que se desprende algo de mi cuerpo,
para poder tocarle aunque sea en silencio...
Steel Rose
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